Mercados

Si el mercado ya cayó, no caigas tú también

El mercado sube y baja, pero muchos pierden por dejarse llevar por el miedo. Te ayudamos a invertir con disciplina para no caer en los errores más comunes.

Imagínate que subiste a la montaña rusa de tus sueños. Esa que viste mil veces en Instagram y que te hacía volar de la emoción. Subiste confiado, emocionado y preparado para el vértigo. Sin embargo, en la primera curva fuerte, sientes miedo, pánico y gritas: “Me quiero bajaaaaar”. Crees que ya no puedes más, que no podrás tolerar lo que viene hacia adelante. Tu cabeza va a mil por hora mientras te encuentras en una nueva subida lenta y de un segundo a otro: “paf”. La montaña rusa se detiene casi en el punto máximo de la subida más grande con el carro invertido y tu cabeza apunta hacia abajo. “Ok señor, no se preocupe, le abro”.

Algo así es lo que le pasaría a tus inversiones si no eres capaz de controlar tus emociones cuando los mercados caigan de vez en cuando. Una y otra vez, vemos el mismo patrón: los inversionistas suben felices, pero en la primera caída fuerte, quieren saltar. Y el salto, lejos de salvarlos, los deja fuera de juego justo antes de la recuperación. Ahí, cuando todo empieza a mejorar, sus inversiones ya no están arriba del carro correcto.

Esta tragedia repetida ha sido documentada por Morningstar una y otra vez. ¿El resultado? Los inversionistas, en promedio, ganan menos que los propios fondos en los que invierten por entrar tarde, salir temprano, y vender cuando el miedo habla más fuerte que la razón. A esto le llamaron el Investor Return Gap, que en simple se refiere a la diferencia entre lo que renta un fondo… y lo que renta para quienes no se quedan permanentemente en él.

¿Qué nos pasa cuando caen los mercados?

No es un tema técnico. Es humano. Lo explicó Kahneman con su “Prospect Theory”, en la que nos dice que las pérdidas nos duelen el doble de lo que nos alegran las ganancias. Esa es la razón por la que cuando el mercado cae, sentimos que se acaba el mundo.

No importa que estemos invirtiendo a 10, 20 o 30 años plazo. Nuestro cerebro nos invita a intentar sobrevivir y a dejar de sufrir, y el resultado es que queremos salir corriendo. Sin embargo, lo que no sabemos es que salir corriendo tiene un costo.

El mercado se recupera. Lo ha hecho siempre. Y quienes se quedan, son quienes ganan. “La mayoría de los retornos en las acciones se concentran en estallidos agudos comenzando en períodos de gran pesimismo o miedo.” – Bill Miller

¿Te suena familiar? ¿Estabas invertido en marzo de 2020 y vendiste? ¿Te dio miedo en octubre de 2008? ¿Qué hiciste con la caída del Coronavirus o con los alardeos de Trump? Es entendible que nos pongamos nerviosos. Pero también es evitable que cometamos errores de principiante.

Ya, ¿pero de verdad el mercado va a caer?

Sí, va a caer. Es un hecho. El problema es que ni tú ni yo sabemos cuándo. Tampoco lo sabe tu amigo “el experto”, ni menos los economistas ni los titulares de la prensa.

El mercado en el día a día sube y baja. Lo que ocurre es que si le das tiempo, los plazos en los que sube son cada vez más largos. Y está bien, esto no debería ser un problema para ganar dinero invirtiendo. Porque para ser buenos inversionistas, y obtener buenos retornos, no necesitamos predecir las caídas.

Solo necesitamos permanecer invertidos el tiempo suficiente como para ver las subidas. El problema es que muchas personas no se conforman con hacerse ricas con una alta probabilidad de éxito ahorrando e invirtiendo todos los meses. Lo que realmente anhelan es hacerse ricas rápidamente.

Una vez, Jeff Bezos le preguntó a Warren Buffett: "Warren, tu estrategia de inversión es muy simple. ¿Por qué no todo el mundo la copia?". A esto, Buffett respondió: "Porque nadie quiere hacerse rico lentamente."

Lo que sí podemos hacer

En Nauta, no jugamos a adivinar. Diseñamos planes financieros y portafolios diversificados siguiendo reglas claras.

Además, buscamos proteger a nuestros clientes de nuestros propios sesgos. No porque seamos más inteligentes, sino porque sabemos que sin disciplina, hasta el mejor inversionista se hace trampa en el solitario. El mercado va a caer y va a subir. Y lo volverá a hacer. Tú solo debes preocuparte de no caer junto con él.